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Los láseres de última generación son una herramienta fundamental para el tratamiento de las secuelas de acné. Se utilizan láseres ablativos o no ablativos según el caso individual. Mediante una acción de bioestimulación y regeneración cutánea inducen una importante mejoría de las cicatrices que puede llegar hasta el 80-90%.
Las terapias que se llevan a cabo para prevenir y tratar los queloides y las cicatrices hipertróficas son diferentes. Se suelen utilizar varios métodos combinados con tratamientos láser para obtener un resultado estéticamente satisfactorio y duradero. El láser de Co2 fraccionado y el láser de colorante dye 595 nm son los más utilizados.
Nevos dérmicos (lunares), queratosis seborreicas, xantelasmas, verrugas y fibromas de la piel, se eliminan eficazmente con láser de dióxido de carbono (CO2), dejando una piel nueva y disminuyendo el riesgo de una mala cicatrización. El láser de CO2 permite un tratamiento de eliminación de este tipo de lesiones con la máxima precisión y el mínimo efecto lesivo para el tejido circundante, lo que favorece la pronta recuperación.
El envejecimiento del rostro se caracteriza por la presencia de piel atrófica (seca y rugosa), poros dilatados, arrugas más o menos pronunciadas. Manchas solares y capilares con distinto tamaño y forma completan el cuadro clínico de la piel envejecida. Con las tecnologías láser (ablativo o no ablativo) e IPL (luz pulsada intensa) es posible devolverle a la piel un aspecto saludable y radiante.
Existen dos tipos de estrías: las recientes (Striae rubrae), de color rosa/rojo, y las de aparición más antigua (Striae albae), que aparecen translúcidas y deprimidas a nivel cutáneo. Además, el tejido afectado suele perder su capacidad de pigmentación, por lo que se vuelven más visibles tras la exposición al sol. El láser de colorante Dye se ha mostrado especialmente útil en el tratamiento de las estrías recientes, mientras que el láser fraccionado de CO2 o los láseres fraccionados no ablativos se utilizan en el tratamiento de las estrías más antiguas.
La rosácea (Couperosis en su primer estadio) es una afección crónica de la piel que afecta a los vasos de la cara y cuyos síntomas incluyen enrojecimiento, ardor e irritación. Gracias a los últimos avances en medios diagnósticos y en tecnología láser, podemos hoy en día tratar con éxito, de forma rápida y segura, los vasos de pequeño y mediano calibre, tanto superficiales como profundos, asociados a la rosácea.
Existen numerosas afecciones de la piel que afectan a la vascularización de la cara, fruto de la dilatación de los vasos, en forma de venitas o rojeces. Cuando dichas alteraciones vasculares son únicas y tienen forma puntiforme se las conoce como "puntos de rubí" (cherry angioma), cuando tienen forma rectilínea se las denomina "vasitos rojos" (telangiectasias), mientras que cuando se ramifican se las llama "rañas vasculares" (spider angioma). Mediante los últimos avances en medios diagnósticos y terapéuticos con láser, podemos hoy en día tratar con éxito, de forma eficaz y segura, dicho componente vascular.
Dentro del grupo de los angiomas destacan por su complejidad a la hora de asociar tratamientos las manchas en vino de Oporto, que aparecen en recién nacidos en cualquier localización anatómica y que no desaparecen espontáneamente, así como los hemangiomas (capilares o cavernosos) que son tumores benignos que adquieren coloración rosada o violácea. La valoración médica personalizada es imprescindible para escoger el tratamiento adecuado para cada paciente. Nos tomaremos el tiempo necesario para hacer una detallada historia clínica, y haremos uso de la última tecnología en herramientas diagnósticas para la piel.
Las lesiones vasculares de los miembros inferiores, a parte de las secuelas estéticas, pueden causar síntomas molestos como dolor y pesadez de piernas, calambres. Para eliminar las venas de las piernas lo más efectivo es el uso del láser de Neodimio-Yag y la Escleroterapia (dependiendo de la dimension de los vasos). El láser de Neodimio-Yag funciona coagulando el vaso sanguíneo para que sea el propio organismo el que lo elimine de forma natural: máxima precisión y mínimo efecto lesivo para el tejido circundante, lo que favorece la pronta recuperación.
De carácter absolutamente benigno, muy a menudo se acompañan a otros signos de envejecimiento cutáneo como pequeños capilares y elastosis. Pueden afectar a la cara, pero también a zonas del cuerpo como el escote, los brazos y el dorso de las manos. Su tratamiento pasa inicialmente por un correcto diagnóstico para poder excluir cualquier lesión pigmentada de carácter neoplásico. Se pueden tratar con la tecnología más avanzada en el campo de los láseres médicos, como el Laser Q-Switched o Luz Pulsada (IPL) de 4ª generación, dejando la piel con un tono más uniforme y luminoso.
La hiperproducción de melanina da lugar a las hiperpigmentaciones del melasma, con afectación más frecuente en mejillas, nariz, frente, labio superior y mentón. El embarazo y la toma de tratamientos hormonales sustitutivos (píldora anticonceptiva) pueden ser desencadenantes. Esto se ve agravado si además hay una exposición solar sin fotoprotección. La tecnología láser y Luz Pulsada (Láser Q-switched y láser a picosegundos, IPL de 4 generacion) han demostrado ser más eficaz que los métodos utilizados en el pasado para el tratamiento del melasma, sin embargo, las recaídas siempre son posibles.
El único método efectivo y seguro para eliminar tatuajes es el uso de láseres. Los láseres Q-switched son capaces de fragmentar los gránulos de pigmento de los tatuajes, que luego son eliminados por el sistema inmunitario del paciente. La eliminación debe realizarse de forma gradual y en sesiones repetidas para evitar dejar cicatrices. El número de sesiones varía según: tipo de colores e intensidad, localización anatómica, profundidad del tatuaje.
La depilación láser es el método más moderno, eficaz, seguro, duradero, cómodo y rápido para eliminar progresivamente el vello de forma permanente. La selección del laser es específico por cada paciente y depende de condiciones como fototipo de piel, color y grosor del vello, extensión de la zona a tratar. Hoy en día existen principalmente cuatro tipos de sistemas de fotodepilación (con longitudes de onda diferentes): láser Neodimio-YAG (1064 nm), láser Diodo (810 nm), láser Alejandrita (755 nm), sistemas de Luz Pulsada Intensa (IPL).
Las tecnologías láser se utilizan hoy en día para tratar condiciones particulares que pueden afectar las áreas genitales femeninas: La atrofia vaginal y el liquen escleroatrófico se encuentran entre las más frecuentes. Los resultados son sumamente satisfactorios y las tecnologías utilizadas son: láser de co2 fraccionado, láser de erbio, láser de colorante Dye 595.
